La Sociedad Cultural José Martí de Pinar del Río entregó el reconocimiento “Con todos y para el bien de todos” a una decena de pedagogos consagrados al estudio y difusión de la vida del Apóstol de Cuba.
Esta iniciativa, que con carácter anual honra el Día del Educador, favorece el intercambio y estimula el acercamiento al legado pedagógico del Maestro, quien identificó en la enseñanza una “obra de infinito amor”.
Herederos de ese precepto, los jóvenes pinareños Raima González Benítez y Yosmany Ventura Pérez, recibieron la distinción, un estímulo al aporte de ambos a la promoción del ideario martiano, desde las aulas universitarias y la revista cultural Estamos Contigo, de Radio Guamá.
El espacio, que lleva por nombre “Cómplices de la Virtud”, deviene también agasajo a aquellos que aun retirados de las aulas, llevan el magisterio a hogares y comunidades, explicó Ricardo Álvarez, presidente de la Sociedad.
El encuentro rindió homenaje póstumo a Luis Pérez, un educador por excelencia, recientemente fallecido.
El presidente de la Sociedad Cultural José Martí destacó el singular vínculo que nutre este reconocimiento.
La idea nació de Agustín Montano, un pinareño que residió más de 25 años en España, precisamente en la casa donde vivió José Martí en Zaragoza. Gracias a su gestión, se ha establecido un puente cultural con la Universidad de Zaragoza y la Sociedad de la Cruz Martis, donde también se entrega el reconocimiento “Cómplice de la Virtud” a personas que promueven la obra del Apóstol, explicó Álvarez.
El vicio tiene tantos cómplices en el mundo, que es necesario que tenga algunos cómplices de la virtud. Al corazón se le han de poner alas, no ancla. Y esos son nuestros maestros”, expresó.
La Sociedad Cultural José Martí en Pinar del Río reafirma así su convicción de que la labor educativa trasciende las aulas y se ejerce, desde la salud y la cultura, en la familia y en la sociedad, manteniendo viva la virtud de las nuevas generaciones.
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