Maribel Lazo Corbea creció cerca del Cuyaguateje, rodeada de plantaciones de tabaco, yuca y boniato, en su natal Guane, donde desde muy pequeña sintió pasión por las labores agrícolas.
Al concluir el preuniversitario, optó por la ingeniería agrónoma y tras recibir el título, tuvo la oportunidad de poner en práctica todo el conocimiento adquirido, y demostrar su amor por la tierra en campos del municipio de Los Palacios.
“Me gradué en el año 90, de ahí vine para acá a cumplir mi servicio social. Me ubicaron en la entonces Empresa de Cultivos Varios, hoy Agroindustrial Cubaquivir. Trabajé en la granja Macurije, donde atendían plantaciones de plátanos y la hortalizas”, cuenta Lazo Corbea.
Cuando en 1996 inició en Los Palacios el Programa de la Agricultura Urbana comenzó a trabajar en él, explica que primero atendió el área de frutales, después las flores, y hoy está en un organopónico que produce hortalizas.
“Me siento bien aquí. Más que un colectivo, somos una familia. Trabajamos dos compañeros y yo, que soy la ingeniera. Compartimos las ideas, ellos también tienen experiencia en la agricultura”, agrega.
Reconoce el apoyo de toda su familia en el logro de cada objetivo, sobre todo de su esposo que le ayuda en las tareas de casa e incluso, cuando lo necesita, hasta en las labores del organopónico. “Soy más palaceña que guanera”, asegura.
La ingeniera Maribel Lazo Corbea vincula las tareas del hogar con el trabajo, hace realidad su pasión por las labores agrícolas y desde el organopónico La Piedra, en el municipio de Los Palacios, oferta las cosechas a la población.
