
Rusia calificó de “peligrosa” la decisión de Reino Unido, Francia, Alemania y Estados Unidos de eliminar los límites al alcance de las armas suministradas a Ucrania, y añadió que socava los esfuerzos por alcanzar una solución política al conflicto.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó a la prensa que la determinación de esos cuatro países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), «va absolutamente en contra de nuestras aspiraciones de lograr un acuerdo político».
Las palabras del jefe del servicio de información presidencial ruso responden a las declaraciones del canciller alemán, Friedrich Merz, quien aseguró que Kiev ahora puede utilizar el armamento occidental para atacar blancos en territorio ruso.
El anuncio ocurre en medio de un aumento de los bombardeos ucranianos contra blancos rusos, incluyendo instalaciones civiles; y de reportes de más de 400 ataques con drones, contra ciudadanos e infraestructura en Donetsk, durante la última semana.
En ese contexto, Peskov argumentó que las últimas operaciones del Ejército ruso contra instalaciones militares ucranianas son una respuesta a los golpes masivos de Kiev contra objetivos civiles en Rusia.
«Vemos a los ucranianos golpeando nuestras instalaciones de infraestructura social, infraestructura pacífica. Se trata de un ataque de represalia, un ataque de represalia solo contra instalaciones militares, contra objetivos militares ucranianos», indicó.
El presidente Vladimir Putin ha advertido en múltiples ocasiones que cualquier intervención occidental en el conflicto será interpretada como una violación a la soberanía rusa y generará una respuesta contundente.
(Con información y foto de Prensa Latina)