La Escoba Amarga o Confitillo, conocida en el mundo científico por el nombre de Parthenium hysterophorus, es una hierba de la que todos los agricultores tienen la peor opinión, ya que invade los cultivos, causando grandes pérdidas económicas. Sin embargo, a la par de esos males, es preciso reconocer que la poderosa planta posee varias potencialidades en la medicina.
El máster en Ciencias Carlos César Callava Couret, especialista en medicina natural y tradicional, abundó en esas propiedades durante el segmento La solución natural, del programa Rumbos.
El experto recordó que, tradicionalmente, la escoba amarga ha sido empleada como remedio para la fiebre y en baños para los granos y las neuralgias así como para combatir el reumatismo, los gusanos redondos en el intestino humano y para múltiples problemas de la piel, como champú antiseborreico.
La hierba es originaria del norte de México y de los Estados Unidos, pero de allí se ha extendido a toda la América y hasta Australia pasando por la India, países en donde causa los mayores estragos. Los agricultores intentan controlarla por medios químicos y biológicos, ya que sus flores o corolas se extienden con los vientos de una forma inmediata y se propaga también con el comercio internacional de granos contaminados con partenina.
Es esta una yerba anual estilosa pubescente un tanto vellosa, comúnmente muy ramificada, de 30 a 70 cm de altura, hojas alternas de contorno aovado. En ella se han encontrado efectos antioxidantes, al poseer una buena cantidad de bioactivos fenólicos, además de otros componentes.
Un artículo de revisión de una revista mexicana, firmado en el año 2024, legitima la utilidad de la planta en diversas actividades y procesos: se puede utilizar con fines medicinales de forma industrial a gran escala; actúa como analgésico y en el tratamiento de enfermedades como reumatismo muscular, problemas hepáticos, amebiasis; se utiliza como sustrato en sistemas de producción de biogás y también como mejorador de suelos. Asimismo, la industria textil ha encontrado propiedades a la partenina, uno de los componentes de la escoba amarga, para eliminar algunos tintes y pigmentos que utilizan en sus procesos de teñido de prendas.
En el transcurso del programa, Callava Couret destacó también la existencia de tintura de Escoba Amarga en las farmacias cubanas de medicina natural. Recomendó usarla como antibacteriano en escoriaciones, granos y otros problemas de la piel, de acuerdo con lo pautado en el Formulario de Fito y Api Fármacos, oficial desde 2017 en Cuba.
Además, dijo que en la Universidad de Las Villas en 2024, se estudió el Extracto Fluido de la planta para su uso en los dispensarios, lo cual demostró la actividad fasciolicida de extractos acuosos de la planta y dio paso a estudios farmacognósticos, tecnológicos y analíticos con la especie.
Por Carlos César Callava Couret
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