
El Ministerio de Salud Pública de Cuba (Minsap) informó que durante la última semana se han intensificado las acciones de vigilancia epidemiológica y control de vectores. Esta medida responde al incremento en el número de casos febriles asociados a arbovirosis, como el dengue y el chikungunya.
En conferencia de prensa, la viceministra de Salud Pública, la doctora Carilda Peña García, detalló que doce provincias han reportado un aumento en la evidencia de transmisión de dengue.
Entre los territorios más afectados se encuentran Guantánamo, Ciego de Ávila, Matanzas, Cienfuegos, La Habana, Villa Clara, Sancti Spíritus y Camagüey.
Asimismo, señaló que en trece territorios se ha confirmado la circulación activa del virus chikungunya, con focos de mayor concentración en Matanzas y La Habana, donde la alta densidad poblacional y las condiciones geográficas favorecen la propagación del mosquito transmisor.
El reporte de la última semana registró 13 mil 071 nuevos casos febriles. Esta cifra, según explicó la viceministra, no solo refleja la presencia real de la enfermedad, sino también la eficacia del fortalecido sistema de vigilancia, que actúa desde la aparición de los primeros síntomas sin esperar una confirmación clínica.
La tasa nacional de casos sospechosos de dengue se situó en 24 coma 3 por cada 100 mil habitantes, lo que exige, según precisó Peña García, una respuesta intensiva y coordinada en todos los niveles del sistema sanitario.
Ante las limitaciones de recursos, las autoridades han priorizado las zonas de mayor transmisión, garantizando la aplicación de insecticidas y abate en las áreas más críticas. Esta estrategia cuenta con el apoyo de carros de tratamiento adulticida y equipos portátiles desplegados en todas las provincias.
La viceministra también destacó el papel fundamental del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), que alberga el laboratorio de referencia regional para arbovirosis, dirigido por la doctora María Guadalupe Guzmán. Este centro permite monitorear el comportamiento de los virus y anticipar posibles escenarios de riesgo.
En sus declaraciones, Peña García hizo un llamado a la población para mantener la higiene en los hogares y adoptar medidas de protección contra las picaduras de mosquitos, recalcando que la disciplina ciudadana es un elemento esencial para cortar la cadena de transmisión.
Por su parte, el viceministro de Salud Pública, doctor Reynol Delfín García Moreiro, afirmó que el sistema nacional de salud ha activado todos sus componentes estratégicos para garantizar una respuesta integral, organizada y efectiva.
Esta movilización busca hacer frente a la confluencia de varios desafíos sanitarios, incluyendo las arbovirosis, los virus respiratorios y las afecciones digestivas. García Moreiro subrayó que más de 10 mil 700 consultorios médicos de la familia se mantienen activados, con médicos y enfermeras capacitados para ofrecer una atención primaria eficaz, lo que contribuye a evitar complicaciones y hospitalizaciones innecesarias.
Precisó, además, que el país cuenta con 451 policlínicos dotados con servicios de urgencia y terapias intensivas a nivel municipal. La mayoría de los pacientes reciben actualmente atención bajo ingreso domiciliario, con seguimiento continuo desde su área de salud, mientras que se prioriza la hospitalización de menores de dos años, mujeres embarazadas y personas con comorbilidades.
El viceministro recordó que la experiencia acumulada durante la pandemia de COVID-19 fortaleció significativamente la capacidad de respuesta del sistema sanitario, el cual hoy se apoya en la docencia, la innovación y la comunicación para enfrentar los desafíos actuales.
(Con información de la Agencia Cubana de Noticias.)



