
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertó hoy que más de 12 millones de niños en Medio Oriente y el norte de África han sido asesinados, mutilados o desplazados como consecuencia de los conflictos armados registrados en los últimos dos años.
Los datos divulgados revelan una crisis humanitaria creciente: para este año, se estima que 45 millones de menores en la región requerirán ayuda urgente, lo que representa un aumento del 41 por respecto a 2020.
El organismo advirtió que la falta de fondos está limitando programas esenciales, como el tratamiento de la desnutrición grave, el acceso a agua potable y las campañas de vacunación contra enfermedades mortales.
Además, su informe destaca que 110 millones de niños viven en zonas en guerra, donde hogares, escuelas y hospitales han sido dañados o destruidos por los combates.
El director regional de Unicef, Edouard Beigbeder, en declaraciones recientes dijo que “a medida que empeora la situación de la infancia en el área, los recursos para responder son cada vez más escasos”.
«Hay que poner fin a los conflictos armados. La defensa internacional para resolver estas crisis debe intensificarse y el apoyo a los niños vulnerables debe aumentar, no disminuir», aseveró.
(Con información y foto de Prensa Latina.)