
Cuba ratificó hoy su firme rechazo a las medidas coercitivas unilaterales, en especial al bloqueo económico impuesto por Estados Unidos, al que calificó como una «guerra económica absoluta y despiadada».
Así lo expresó el viceministro de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, durante la Reunión Plenaria de la Asamblea General de Naciones Unidas sobre Eliminación de las Medidas coercitivas extraterritoriales unilaterales como medio de coacción política y económica.
Fernández de Cossío afirmó que el bloqueo estadounidense «rebasa el calificativo de medidas coercitivas unilaterales extraterritoriales y el concepto de embargo comercial», constituye un sistema de presión diseñado para asfixiar a Cuba.
«Desde su imposición en 1960, su objetivo ha sido deprimir el nivel de vida, reducir los ingresos reales, generar hambre, ocasionar escasez, quebrar la voluntad política del pueblo y dominar a la nación», denunció.
Subrayó que Estados Unidos no solo prohíbe el comercio bilateral, sino que persigue y sabotea las transacciones comerciales de la nación caribeña con terceros países. «Esta política viola el derecho soberano de otras naciones a relacionarse Cuba», enfatizó.
El viceministro destacó cómo Washington extiende su bloqueo más allá de sus fronteras, al prohibir la exportación a Cuba de cualquier producto con al menos 10 por ciento de componentes estadounidenses, lo que en una economía globalizada afecta casi todo el comercio.
Asimismo señaló el control desproporcionado que tiene Estados Unidos sobre las transacciones financieras internacionales, con las que “se ha propuesto, y logra limitar con cruel eficiencia, las posibilidades de Cuba para obtener créditos, recibir y ejecutar pagos”.
Reiteró que, al incluir a Cuba en la lista de «países patrocinadores del terrorismo», Washington desató un conjunto adicional de medidas coercitivas, en especial de carácter financiero y “también dirigidas a coaccionar, y tomar acción contra ciudadanos de más de 40 países y contra el derecho de éstos a viajar libremente a Cuba”.
Fernández de Cossío denunció que Estados Unidos amenaza a gobiernos y empresas que cooperan con la nación caribeña, incluso en programas humanitarios como la colaboración médica. «Esto atenta contra la soberanía de otros Estados y contra el Derecho Internacional», afirmó.
“Las medidas coercitivas unilaterales y extraterritoriales son un crimen y esta Asamblea General hace bien en pronunciarse con fuerza en su contra. Hace bien con solidarizarse con todas las naciones y pueblos que sufren castigo tan cruel e ilegítimo», concluyó el diplomático cubano.
(Con información de Prensa Latina y Foto de CubaMinrex)